me derrito. hoy ha sido -es- lejos el día más caluroso del año. el aire se siente caliente, denso, quieto. un día algo lento, una tarde soleada y una noche que no refresca. me invitaron al teatro, música clásica, danza, burbujas, muchas burbujas. y terminando, la idea de estar en casa. sí, fuimos a un lugar de comida peruana. cocina peruana en chile, lo sé. suena patética pero no lo es. el dato bueno, una picada, algo rico, con sabor -y olor- de casa. de ese mar que ya no huelo, de esa gente que ya no veo, de esa que soy pero que ya no soy.
enredada.
y lo peor de todo, acalorada.
malditas ganas de una chela helada.
estoy sola. todos se fueron a algún lado y yo aproveché para quedarme aquí, sin nada mejor que hacer que tomar un largo baño. te despiertas noon-ish, te quedas en pijama till 1pm y de ahí abres la heladera en busca de grasa que echarte al cuerpo. puede ser helado, las sobras de la torta de ayer, lo que fuera que llene ese vacío que amaneció contigo hoy y que no se va por más que v intenté hacerte tomar todas las pastillas del mundo.
v te conoce bien, y antes de irse escondió toda esa comida ultra fat que podría hacerte daño. te encanta comer, aún cuando tengas un gran problema con eso. hace demasiado que no te das un buen atracón, semanas que no vomitas, todos juran que sigues siendo miss perfection y tú sólo piensas en 30 minutos a solas y cuánto pizza puedes comer. al final sólo comes pollo y ensalada, lo que hay, l oque encuentras, como siempre. te metes a la ducha y te sacas toda la mugre adherida al cuerpo. la real y la metafórica, crees.
dejas el televisor prendido, ese sonido te acompaña, te sientes menos sola, te encremas entera y abres el msn mess a ver si hay alguien que valga la pena. no lo hay, así que sigues en "no conectado" y vas a atender el teléfono que sigue sonando. hablas un par de minutos, te sacas las cremas, te secas, te vistes y ves ese programa que de no estar sola jamás verías. porque sí, proque nadie lo sospecharía, porque te da vergüenza asumir que tú también ves basura uno que otro domingo.
a tu edad y viendo mtv??? sí, claro, porque cuando eras chica mtv no era la mierda que ya es ahora, la que se perfilaba hace un par de años. sin embargo, adorarías trabajar en su área de marketing, debe ser genial estar ahí y diseñar esas estrategias que emboban a miles de teenagers y demasiados treintañeros despistados, casi todos tus amigos incluídos. por qué siempre te juntaste con "gente grande"? casi todos mayores que tú, vaya a saber por qué. yo sí sé, pero no me apetece hablar de eso. no aquí, al menos.
anoche, saliste con un par de amigos. ya estás mejor, adviertes. aunque igual es un poco extraño que el sitio que escogieron fuera tu lugar de trabajo. weird, lo menos. te encontraste con varios conocidos, te saludaron con cariño y por más que buscaras, boss no estaba a la vista en ese momento. dvg pidió un mojito y mm cambió el típico pisco sour por un daiquiri de frambuesa. never your choice, pero bueno. al final, niña buena, miren cómo se cuida la enfermita, terminé pidiendo lo de siempre. sprite zero con harto hielo y una rodaja de limón, as usual. ya todos lo saben, hasta podrían ordenar por ti. y aún no sabes si eso es bueno o malo. te estarás volviendo repetitiva? la respuesta es sí. cuestión de leer tus viejos posts, los otros blogs.
divagas, piensas, abandonas, retomas.
vuelves a abandonar.
no es mi mejor domingo. tampoco el peor.
mientras releía cosas de hace mil años, demasiado, no podía dejar de pensar en cómo todo se torció. en cómo jugaba con las letras, formaba palabras y podía cruzar los dedos con la certeza de saber que a fin de cuentas, todo estaría bien.
pero hoy las letras me son esquivas, las certezas escasean y ya no espero comentarios. porque hoy, aquí, ahora, no quiero ni puedo depender de lo que otros tengan que decir.
yo sé, yo creo, yo siento, que esto es lo correcto. tiene que serlo.
y sí, mil gracias por el skin.
anoche me costó dormir. ligeramente insomne, aunque igual cansada. así de simple, así de complicado. unos ojos que se cierran pero siguen viendo, una voz al otro lado de la línea y un negro que va ocupándolo todo hasta lograr borrar ciertos recuerdos. cosas que asumí deberían estar olvidadas, enterradas. pero claro, la película nunca la entregan rebobinada y a una no le queda sino ver partes que ya vio, o que simplemente no quisiera ver. como ayer.
no puedo creer que aún recuerdes.
curiosamente, hoy también es domingo.
soundtrack para el día de hoy: el equilibrio...de piratas.