mamá nunca fue muy demostrativa. afectuosa un poco, pero la gracia es que no se note. al menos, esa parece su consigna. fría, distante, aún cuando con otros aparezca como una mujer encantadora. quizás, simplemente sea que hablamos lenguajes distintos, que vemos el mundo con ojos diferentes. no lo sé. y a estas alturas de mi vida, aún no estoy lista para preguntarme porque mi madre y yo no conectamos.
decía que ella es así, tal o cual, fría como ella sola, poco demostrativa o lo que fuere, pero ahora que estuve (estoy) enferma no atinó más que a sorprenderme. una carta, no muy larga, pero carta al fin y al cabo. el contenido no lo diré, pero sí diré que nunca deja de sorprenderme.
gracias por hacer el intento. creo.