es bueno parar y darse un respiro. tomarse unos minutos y pensar que existe algo más allá de mi ombligo. desde que volví de vacaciones han sido unos días intensos, demasiado trabajo, demasiadas ganas, demasiadas cosas que probar en muy poco tiempo. es como si no me bastaran 24 horas, como si no tuviera necesidad de dormir, como si perdiera el tiempo al estar escribiendo esto. y mi mente vuela, me dice son 20:48 y en vez de estar aquí, podría estar respondiendo mails, avanzando trabajo para hacer más eficiente la siguiente mañana. obsesivo, totalmente dependiente, lo sé.
pero no, hoy paro (luego de revisar por enésima vez mi mail) y digo basta. al menos estas horas, las dedicaré a lo que importa. en unas horas, pollo bebé está de cumpleaños. la más linda de todas cumple diecisiete y yo no estaré con ella a las doce para asfixiarla a punta de besos y abrazos. lo que sí, ya programé la alarma de mi cel para que suene con estas dos horas de diferencia para que me despierte y pueda ser la primera en saludarla.
siempre primera, es obsesivo, lo sé. pero qué diablos, es pollo bebé.
FC, frejolita.