estoy acá porque no tengo dónde más estar. esa es la verdad. así, de frente, de porrazo, de sopetón. nunca tan trágico ni tan terrible, sólo tedioso. podría estar haciendo otras cosas, arreglando mi vida, por cierto, pero prefiero estar aquí perdiendo el tiempo. porque hoy, aquí, para mí, esto no puede ser peor que aceptar que no tengo nada mejor que hacer.