nunca fui buena en nada. menos con las palabras. quizás por eso escribir esto me cuesta tanto.
no sé, no quiero pensar. estoy rara, me acerco, me alejo y al final me quedo pegoteada, al medio, buscando un sitiecito seguro entre tanto calor. uno donde no me encuentres. donde ni tú ni nadie pueda hacerme daño. huir, así de simple, de cobarde.
"al tercer día resucitó entre los muertos...". o en mi caso, A. me levantó a punta de gritos y chantajes baratos. no eres la misma de hace un mes, dijo. no lo permitiré, no te dejaré caer. no de nuevo. y su determinación puede más que mi falta de voluntad. al menos hoy. porque hoy, aquí, ahora, todo me da igual. si estás o no estás. si vienes o te vas. si trabajas o te regresas a esa maldita ciudad.
al final, me bañé, me vestí y salí a comer. cero ganas de enfrentarme al mundo.
depresión, otra vez. me siento caer.
a lo mejor son ideas mías....no sé.
tampoco quiero saber.